Reformas de cocinas (Eixample, Barcelona)

Resumen del proyecto de reforma de cocina

Esta reforma integral de cocina se sitúa en l’Eixample (Barcelona); más concretamente en la segunda mejor calle del mundo para vivir, según la lista «The 30 coolest streets in the world» de Time Out International: en el Passeig de Sant Joan, muy cerca del Arco de Triunfo.

Contactó con nosotros una pareja que había comprado un piso en una finca regia y querían reformarlo. Uno de los motivos por los que fuimos los elegidos para realizar la reforma de la cocina, fue que somos distribuidor oficial en Barcelona de cocinas Santos, marca española de reconocido prestigio, que destaca tanto en cuanto a estética, como en funcionalidad y calidad de sus acabados.

El piso y su reforma integral

El objetivo de la pareja, en cuanto a la reforma integral, era ganar en luminosidad y espacio. La vivienda estaba muy compartimentada por tabiques, lo que provocaba que no se aprovechara la luz que entraba por la galeria exterior que daba justo al paseo de Sant Joan.

Por este motivo, se eliminó una de las habitaciones, pasando de tres a dos y se unió la cocina con el salón, ya que a la pareja le gustaba mucho cocinar y querían compartir estos momentos con amigos, sin la necesidad de que los dos o, por lo menos, uno de ellos, se quedara aislado.

Para conservar el encanto de este tipo de pisos, tan singulares y característicos de la ciudad de Barcelona, se rescató la “volta” catalana, que quedaba oculta bajo el falso techo, la cornisa y el rosetón de escayola del salón.

Del suelo se conservaron algunas alfombras del material hidráulico original y el resto se pavimentó con parquet, para darle calidez al lugar. Se quitó el yeso de las paredes y se dejaron limpias, con el ladrillo visto, para aumentar la estética y la calidez que necesita un hogar de estas características.

¿Cuáles eran los retos de esta reforma de cocina?

La particularidad de este piso, y del reto de la reforma, era que al piso se entraba por la cocina. Este aspecto le daba un protagonismo sin igual al espacio. Entonces, ¿cómo ocultar la cocina cuando entras, si es lo primero que ves?

Por otro lado, teníamos que conseguir que la reforma fuera discreta, en cuanto a que no podía tener demasiado protagonismo, y con ello no eclipsar los detalles y singularidades del piso.

La distribución de la cocina reformada

Antes de abordar el tema de “invisibilizar la cocina al entrar”, decidimos la distribución de la cocina. La dividimos en tres zonas principales:

1. Zona de trabajo ubicada en la península destinada a la elavoración, cocinado y lavado.
2. Zona de almacenamiento vertical, donde incluimos el horno, la nevera, la despensa y un espacio para la cafetera y la tostadora.
3. Zona para guardar la vajilla y la cristalería, que funciona como separador de ambientes mediante una pequeña península que divide visulamente los espacios de comedor y de cocina.

Para solucionar el problema principal, y con el objetivo de ocultar la cocina en la entrada, se diseñó una barra más elevada, para desayunos y cómidas informales, que escondía la zona de trabajo y cocinado.

Los muebles de la reforma de cocina

Para mantener la sobriedad de la cocina, y con el objetivo de que no destacara por encima de los elementos arquitectónicos de la vivienda, nos decantamos por muebles blancos combinados con algunos detalles decorativos en madera, como la barra y las estanterías vistas.

Por otro lado, en la misma línea, y para darle mayor sensación de ligereza al espacio, decidimos no poner muebles colgados en pared y limitar la altura de la zona de almacenamiento vertical de forma que quedara más integrada en la pared. De este modo, también ocultamos un poco más la cocina al entrar en el piso.

En la península de trabajo se ocultaba todo: los cubos de reciclaje, los ingredientes de fondo de armario (aceite, pasta, harina, sal, etc), las sartenes, ollas y utensilios de cocina…

Además, la campana la escogimos integrada en la encimera, escondida detrás del mueble, y solo visible en los momentos de uso. Así no había ningún elemento colgante que molestara. La ventaja de esta campana, muy en tendencia, es que no necesita salida de humos porque funciona por recirculación.

Precio de la reforma de la cocina, y duración

El montaje de los muebles de cocina y las encimeras se hizo en una semana y media. El presupuesto fue: 10.500 € para el mobiliario y las encimeras, y alrededor de los 4.000€ para electrodomésticos. Un total de 14.500€.

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