Reforma de cocina (Les Corts, Barcelona)

Resumen proyecto de reforma de la cocina

Como especialistas en reformas de cocinas y baños podemos decir que lo más complicado al afrontar un proyecto es encontrar soluciones adecuadas, no solo a cada vivienda, sino al gusto de cada cliente. Hacer combinar estas dos variables es todo un reto.

Un ejemplo de ello es el proyecto de reforma de la cocina y los baños que realizamos en el barrio de Les Corts, en la ciudad de Barcelona. Silvia, la propietaria, se puso en contacto porque había comprado una vivienda de unos 100 m2, de los años 80, para ella y sus dos hijas, y quería actualizar su imagen, dado que la que tenía se había quedado desfasada.

La reforma de la cocina: el primer reto del proyecto

Era un piso con muchas posibilidades, amplio, cuatro habitaciones, todo exterior… pero la cocina tenía demasiado aspecto de “pasillo” o “de tubo”, al ser estrecha y alargada (1’90m de ancho por 4’6m de largo), acentuado al haber una puerta en cada extremo, una que daba al salón y otra que daba en el descansillo.

Esto hacía que la cocina, un lugar tan importante en el hogar, no tuviera la calidez y la funcionalidad necesarias. Con esta reforma, debíamos devolverle a este espacio el protagonismo que se merecía, y que la familia quería.

Por este motivo, lo primero que decidimos fue tapar la puerta que daba al recibidor. De este modo conseguimos potenciar su presencia, ganando un espacio para guardar los abrigos, y por otro, reubicar la nevera dentro de la cocina, principal obstáculo visual antes de la reforma.

¿Cómo reformar una cocina para hacerla más grande?

Teníamos que conseguir la sensación de amplitud de la cocina, sin que eso afectara a la funcionalidad. Quizás este es uno de los puntos más complicados de conseguir en toda reforma de cocinas de estas características.

Debíamos que optimizar los espacios y conseguir que se pudiera “hacer vida” en la cocina. Tras reunirnos varias veces con la cliente, y dar ella el ok a la propuesta final, rediseñamos la zona de office con una barra alargada, que permitiera desayunar, comer, hacer tentempiés y que, también, sirviera de zona de trabajo auxiliar.

Además, en la zona office incorporamos una tira de luz led, de apoyo a la luz general y para tener una iluminación ambiental más tenue para los momentos de relax.

A continuación, con el objetivo de trabajar esa sensación de amplitud, conjuntamente decidimos que los muebles de cocina Santos y los electrodomésticos fueran de color blanco, y descartamos los muebles altos en las zonas de trabajo, para que el espacio quedara totalmente limpio.

En este sentido, la zona de almacenajes se alojó cerca de la barra, en el hueco, generado al mover la nevera a un lugar más cómodo y discreto. También quitamos el microondas original, antes ubicado en una de las zonas de trabajo y lo integramos en los muebles de cocina, ganando más superficie de trabajo para cocinar.

En paralelo, replanteamos suelos y paredes, junto a la iluminación, para conseguir darle al conjunto un aspecto armónico, cálido y amplio.

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